La educación y el orgullo – Publico.es

Al teléfono móvil me llega un mensaje informativo del centro escolar en el que estudia mi hija: “se ha producido una falta de asistencia a la clase de lengua extranjera”. Luego insiste el parpadeo de la pantalla. Recibo mensajes sobre las clases de Ciencias Sociales, Geografía e Historia, Matemáticas, Iniciación a la vida laboral e informática. Este tipo de mensajes me llenan en otras ocasiones de inquietud. Hoy me siento orgulloso. Mi hija está en huelga y yo soy uno de esos padres, tan parecidos a los terroristas según las consignas mediáticas del partido en el Gobierno, que apoyan la huelga de sus hijos.

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4 Comments

  1. Diego el 19 octubre 2012 a las 02:20

    Me dirijo a usted señor Montero para darle las gracias por seguir instigando a que gente de la misma edad de su hija no pueda concebir jamás en su cabeza el espíritu de sacrificio, de lucha, de integridad y de compromiso que todo estudiante debe tener como máxima.
    No crea señor Montero que soy ajeno al problema de la educación en este país, soy universitario y también he luchado por mis derechos en asambleas estudiantiles y de otras índoles diferentes. A mi juicio esta protesta de hoy es puramente política y partidista. No soy capaz de imaginar de qué se siente exactamente orgulloso de su hija (por este hecho, entiéndase), lo que usted está promoviendo es a tirar la toalla, a enrabietar a la sociedad, y si, por qué no decirlo, incendiar las calles, en vez de solicitar de su hija (y de todos sus lectores), un poco de sacrifico. Yo he estudiado toda mi vida en colegios e institutos públicos, siempre he conocido el hacinamiento en las aulas y demás precariedades, pero pese a todo, mi ilusión siempre era la de aprender. Soy de los que no me gusta aprobar sin estudiar, no me gusta que me regalen nada, y no hay premio mas satisfactorio que el del trabajo bien hecho.
    le pediría que dejara de hacer demagogia llana y burda, fomentase el trabajo, sacrificio y esfuerzo a sus lectores, pues ya que está el patio como está, no lo pongamos peor.
    Saludos.



  2. Luis García Montero el 20 octubre 2012 a las 16:43

    Diego, el sacrificio se pide para conseguir una vida mejor para todos. Sacrificar la educación pública, la sanidad pública y la dignidad laboral de la gente para que los ricos hagan negocio a costa de los pobres, no está dentro de mi manera de pensar. Y no hago demagogia, denuncio una realidad que demuestran los datos. Y denuncio a quienes haciéndose el tonto colaboran como borregos con los poderes injustos. Estoy orgulloso de mi hija porque está aprendiendo a decir que no y porque ya descubre por su cuenta a los hipócraitas.



  3. Carmenlou el 20 octubre 2012 a las 19:17

    El 95% de los padres y madres de mi centro deben ser también unos radicales, izquierdistas partidistas y demagogos…Yo les estaré siempre agradecida por su implicación desde el mismo instante en que las condiciones de la Enseñanza Pública comenzaron a deteriorarse a pasos agigantados. Gracias por sentirse orgulloso de su hija. Estoy segura de que ella también lo estará.



  4. Rosario el 20 octubre 2012 a las 20:13

    Yo también me siento orgullosa de los alumnos que no acudieron a mis clases el día de la huelga, de ellos y de sus padres. Gracias por la palabra precisa, gracias por el apoyo que tanto necesitamos, porque muchas veces nos sentimos solos, aislados en nuestras aulas, avergonzados de nosotros mismos por la incapacidad para organizarnos, para hacer llegar la información a las familias, a la sociedad