Los poetas – EL PAIS Andalucía

Esta semana se han celebrado en Andalucía dos homenajes a poetas decisivos. En Córdoba, escritores y críticos valoraron la obra de Pablo García Baena, una de las voces más importantes de la literatura española actual. En Granada, al cumplirse los 10 años de su muerte, el Ateneo organizó unas jornadas de recuerdo a Javier Egea, otro poeta fundamental. Las consideraciones filológicas, los versos y la reunión de amigos han servido para evocar al autor de Paseo de los tristes (1982), el libro que quiso buscar la sentimentalidad diferente que hiciese posible una sociedad más libre y más justa.

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2 Comments

  1. Abelardo Martínez el 23 noviembre 2009 a las 13:58

    Agradezco aquí las palabras de recuerdo del poeta García Montero, hacia su paisano Javier Egea, hombre que voluntariamente se quitó la vida, como tantos y tantos otros, por unas u otras causas, que no vienen al caso. Ser poeta no es ningún chollo, os lo aseguro. El otro día le decía a una buena amiga, que estamos hechos de una pasta especial, pero para lo bueno y lo malo también.

    Normalmente se suele ser un tipo sensible, al que le afectan las cosas mucho más que a otros. Somos como todo el mundo, con lo bueno y lo malo, tenemos nuestras vanidades y nuestros complejos, como todo el mundo y podemos llegar a amar y a odiar como todo el mundo.

    Hace poco en una tertulia literaria, un hombre de avanzada edad se me encaró; es más ya no volvieron a invitarme más. Dije en mi charla, que el poeta nace, no se hace. Me dijo no sin razón, que Ausias March, empezó a escribir pasados los ciencuenta. Este hombre, escribiía poesía también. había empezado hacía muy poco. Tenía unos sesenta años.

    Me entendió mal, seguro; la poesía no tiene edad, la poesía es libre, democrática, gratuita y necesaria, por supuesto; pero no considero a futbolista al que empieza a jugar a los cincuenta años, ni pintor a quien lo hace por hobby ya jubilado, aunque están en todo su derecho, faltaría más.; el poeta no lo es por tener versos preciosos, o más feos o más premiados. Al poeta lo marca su trayectoria vital, sus años de dedicación, de sufrimiento y alegría con la poesía. En la prisión donde estoy impartiendo un taller literario, están saliendo poemas que ya quisiera escribirlos yo, preciosos, con una carga de profundidad capaz de destruir un submarino nuclear. Cualquier persona puede hacer poemas, es más, es aconsejable que los haga; seguramente más bonitos incluso que los del poeta más laureado; pero ser poeta es otra cosa; los años, la dedicación, el esfuerzo, las renuncias dicen quien es o no es poeta, independientemente de la calidad de su obra.

    Javier Egea, les gustará más o menos a unos y otros; pero nació poeta, vivió poeta y murió siendo un poeta y así será recordado siempre. Su obra no morirá jamás, jamás.



    • Angela el 10 diciembre 2009 a las 11:02

      El poeta nace, no se hace… por lo tanto no le vamos a medir por su dedicación ni por «sus renuncias», sino por su vida como poeta, se haya puesto a «sacar» sus poemas, antes o después, trabaje de poeta o no… Y por supuesto será la calidad de los poemas lo que nos descubra al poeta.