Las molestias del turista

Hay algo de irritante en el enfado o la indiferencia que muestran los turistas sorprendidos por acontecimientos históricos y catástrofes naturales. Regresan a sus casas y siempre hay en el aeropuerto un periodista dispuesto a preguntar. Es difícil oír una voz que se implique de manera solidaria o política en lo sucedido. Las condiciones sociales de los países visitados no entran en su manual de viaje. Se quejan de las molestias provocadas en sus vacaciones, del trato recibido en el hotel, de la falta de cuidados de la Embajada, de las dificultades para salir huyendo, del dinero que las agencias deben devolverles porque en sus cámaras no está la fotografía deseada delante de las Pirámides o de las aguas del Nilo.

Seguir leyendo en Publico.es – 6 febrero 2011