Colombia, morada al sur
Las noticias internacionales, configuradas según los intereses de los grupos mediáticos, colocan unas gafas opacas en los ojos de los ciudadanos bien informados-desinformados. Los viajes nos ayudan a quitarnos esas gafas para ver la realidad de manera directa. Y la vida tiene a veces sorpresas agradables. Hay matices luminosos sobre los que merece la pena llamar la atención. Como las promesas electorales suelen degradarse en contacto con los despachos, los presidentes de Gobierno tienden a ser siempre mucho peor de lo esperado. En Colombia está ocurriendo lo contrario. Merece la pena tenerlo en cuenta.
Seguir leyendo en Publico.es – 27 febrero 2011