La libertad como alarma social

La palabra ensañamiento suele aparecer en los procesos judiciales como un agravante a la hora de juzgar el delito. Se trata de penar las actuaciones que aumentan de forma inhumana y deliberada el sufrimiento de la víctima, causándole padecimientos innecesarios durante la comisión del delito. El proceso de degradación democrática de la autoridad es tan grave en España que la palabra ensañamiento se ha desplazado de los castigados a los presuntos vigilantes de la ley. El joven Alfon, preso desde la jornada de huelga general del 14 de noviembre, está siendo tratado en la cárcel con ensañamiento.

Seguir leyendo en Publico.es – 27 diciembre 2012