LA MULTITUD TECNOLÓGICA

Hay que conseguir que una multitud no sea un conjunto de soledades.

Escribir literatura supone inventarse un lector. Quien escribe necesita ordenar sus pensamientos, buscar las palabras precisas, imaginar en una dirección determinada, tomar decisiones que implican a otro. El lector ideal, más que la persona que mañana puede comprar un libro, es un esbozo de la conciencia del autor, el lugar en el que aprende cosas de sí mismo al mirarse desde fuera, con una objetividad que lo distancie de su ensimismamiento.

Seguir leyendo en infoLibre:

http://www.infolibre.es/noticias/opinion

/2014/08/30/la_multitud_tecnologica_20995_1023.html

3 Comments

  1. Francisco el 31 agosto 2014 a las 11:08

    Muy complejo, casi inutil o tal vez imposible.Sois, somos espejos donde contemplarnos y a veces sumergidos en grandes masas, como decia Canetti, logramos algun tipo de emoción.



  2. David el 2 septiembre 2014 a las 23:16

    Estimado Luis, lamentablemente la realidad de la opinión pública es tal y como la describes. Al pararme un poco a pensar sobre el origen, lo que genera la opinión vacía, la descalificación sin meditación previa, me encuentro con una realidad compleja:
    -nuestros periodicos, todos sin excepción, practican la propaganda sin demostrar objetividad que inviten al pensamiento.
    -bajo mi percepción, el 90% de lo que se emite por televisión es lamentable.
    -al igual que existen escritores malos que generan obras sin ningún interés, existen lectores express que prefiren un rato de diversión con un libro rápido a pie de arena de playa antes que leer poesía, a Faulkner, Proust o Kafka. Esto último es calificado de tostón por una gran mayoría.
    -en la sociedad pasada y actual, organizaciones de cualquier índole , públicas y privadas, siempre han hecho uso de la mentira y de la opacidad.
    -por lo que he observado hasta ahora son mayoría las personas impulsivas respecto a las prudentes, -y esto viene ocurriendo tanto en esta sociedad tecnológica actual en la que se nos está llevando de la mano a la soledad y a una competitividad individual desbocada, como en épocas anteriores.-
    Todo esto forma un cocktail a mi parecer muy pesimista ante lo cual, ni los medios ni gran parte de los que formamos la masa de ciudadanos, parece que vayamos a poner solución. Ojalá me equivoque y mi comentario no sea más que otra opinión entre tantas.
    Gracias por tu artículo.

    un abrazo



    • lgmontero1958 el 4 septiembre 2014 a las 09:57

      Siempre nos queda, querido David, la defensa de los valores, algo que esté fuera de la dinámica del pesimismo y del optimismo. Gracias por tu compañía y por hacer de esta página un espcio público.